Luis Petri echó al jefe de la Fuerza Aérea, Fernando Mengo: presuntos hechos de abuso y vuelo de aeronaves con fines particulares
El jefe militar fue corrido del cargo por conductas “gravísimas e inadmisibles”, según afirmó el ministro de Defensa; dijo que a través de esta medida buscan “garantizar la transparencia, la ética y el respeto a la ley”; el brigadier general habría autorizado más de 30 vuelos en forma irregular
Luis Petri con Fernando Mengo
LA NACION
El ministro de Defensa, Luis Petri, anunció este jueves pasado el mediodía que desplazó al jefe de la Fuerza Aérea, brighadier general Fernando Luis Mengo, por el uso indebido de aeronaves militares, utilizadas para fines personales, a lo que se suman denuncias de acoso laboral y abuso de autoridad.
Más de 30 vuelos en aviones militares para uso familiar y denuncias de maltrato y abuso de autoridad contra el personal a su cargo acumuló el brigadier Mengo en los 11 meses en que actuó al frente de la Fuerza Aérea Argentina. En esos antecedentes se basó el ministro Petri para echarlo, una vez que los hechos salieron a la luz, según pudo reconstruir LA NACION.
En un comunicado que publicó en sus redes sociales, Petri dijo que relevó del cargo al brigadier Mengo para “garantizar la transparencia, la ética y el respeto a la ley” en las Fuerzas Armadas. “Esta decisión responde a hechos que ponen de manifiesto el uso indebido de aeronaves de la institución con fines particulares, lo que implica una grave violación de la normativa que rige el manejo de los bienes públicos y de las responsabilidades inherentes a su cargo”, explicó el ministro.
Tras ello indicó: “He tomado conocimiento de presuntos hechos de acoso y/o abuso que habrían sido protagonizados por el brigadier Mengo, lo que constituye una falta gravísima e inadmisible”.
Fernando Mengo, Luis Petri y Xavier Isaac
Eran viajes encubiertos, para facilitar el traslado de su novia e hijos entre Buenos Aires y Paraná, que se registraban como vuelos de logística o de instrucción, cuando en realidad se trataba de simples vuelos de pasajeros. Cubrían el trayecto Aeroparque-Paraná, principalmente los días viernes y lunes, y en algunas ocasiones partían de las bases aéreas de Morón y El Palomar.
Según relataron fuentes castrenses a LA NACION, Mengo destinaba para esos menesteres el uso de aviones Beechcraft UC-12B Huron (matricula TC-117), con capacidad para siete u ocho pasajeros, e incluso el Tango 10, una de las aeronaves presidenciales que están en manos de la Fuerza Aérea.
En ámbitos militares deslizaron que la novia de Mengo es suboficial, destinada a la II Brigada Aérea de Paraná, paradójicamente en el sector de registros de vuelos.
Mengo, de 59 años, nació en la provincia de Córdoba e ingresó a la Escuela de Aviación Militar en 1983, tras la recuperación de la democracia. No tuvo, por lo tanto, actuación en la guerra de Malvinas, donde cayeron varios héroes de la Fuerza Aérea. Fuentes aeronáuticas revelaron que ese detalle no es menor, al señalar que más de una vez habría tenido desencuentros con familiares de los militares muertos en las islas.
Entre 2009 y 2010 fue ayudante del entonces jefe de la Fuerza Aérea, brigadier general Normando Costantino, y ocupó luego distintas funciones operativas. Fue secretario general de la Fuerza Aérea y comandante de Adiestramiento y Alistamiento, teniendo bajo su control todas las brigadas y unidades de la fuerza.
Tolerancia cero
El ministro Petri adelantó que ya instruyó el inicio de acciones legales y administrativas para que se investiguen los hechos denunciados, se determinen responsabilidades y se garantice que quienes hayan cometido algún delito “reciban las sanciones que corresponden por la gravedad de su accionar”. Fuentes de Defensa evitaron profundizar los detalles de las acusaciones que pesan sobre el exjefe de la Fuerza Aérea. Su reemplazante, en tanto, aún no está definido.
“En este gobierno, y bajo la gestión del presidente Javier Milei, no hay ni habrá tolerancia para el abuso de poder, la corrupción, ni las conductas que mancillen la integridad de las personas o la confianza de la ciudadanía en nuestras instituciones”, aseveró Petri.
“Este Ministerio de Defensa reafirma su compromiso con la transparencia, la austeridad, la protección de los derechos de las víctimas y el respeto irrestricto a la ley como pilares fundamentales de su gestión”, concluyó.