Tras comprar blindados y cazas F-16, el Gobierno ahora apunta a helicópteros usados de Alemania o Egipto
Con el objetivo de incrementar la capacidad operativa y el poder de fuego de las Fuerzas Armadas, el Gobierno continúa avanzando en su estrategia de rearme y evalúa concretar nuevas adquisiciones antes de fin de año. Luego de la visita del ministro de Defensa, Luis Petri, al Pentágono, y tras cerrar la compra de blindados estadounidenses y aviones F-16 provenientes de Dinamarca, ahora se analiza la posibilidad de incorporar helicópteros CH-53G retirados del servicio por Alemania.
Las negociaciones preliminares ya fueron iniciadas por agregados militares argentinos en Europa y podrían acelerarse gracias al fortalecimiento de los vínculos del actual Gobierno con Estados Unidos y la OTAN.
Desde el oficialismo destacan que esta estrecha relación con Washington —y particularmente con el entorno de Donald Trump— ha sido un factor clave para impulsar un proceso de adquisición de armamento sin precedentes en las últimas décadas. Esta misma sintonía geopolítica también podría facilitar la compra de submarinos que Argentina negocia con Francia desde 2024.
Argentina evalúa comprar helicópteros de Alemania o Egipto
El Gobierno analiza la adquisición de helicópteros CH-53G retirados por Alemania, una aeronave clave en tareas de transporte militar, humanitario y logístico. Fabricados en los años 60 en colaboración con EE.UU., estos helicópteros fueron modernizados hasta hace pocos años para mantener su operatividad.
Otras fuentes hablan de los CH-47E Chinooks egipcios, también pronto a ser dados de baja. Ambos modelos fueron analizados en marzo de este año en este blog en el artículo Helicópteros pesados para Argentina: Super Stallion, King Stallion o Chinook